¿Cómo se realiza un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro?

Introducción

Un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro es una técnica de ingeniería industrial que se utiliza para mejorar la eficiencia de los procesos de producción. La técnica se basa en el análisis de los tiempos y movimientos de los trabajadores para identificar los cuellos de botella de una línea de producción o proceso. Esta técnica se utiliza para reducir los tiempos de producción, mejorar la calidad, aumentar la productividad y disminuir los costos. En este artículo explicaremos cómo realizar un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro.

Paso 1: Preparación

Preparar el área de trabajo para un estudio de tiempos y movimientos implica asegurarse de que el proceso a estudiar cumpla con las siguientes condiciones:

  • El operador domine perfectamente la técnica de su operación
  • El método empleado en el proceso esté estandarizado
  • El empleado, el supervisor y los representantes del sindicato sepan que sus actividades están siendo analizadas

El primer paso para realizar un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro es preparar el área de trabajo. Esto implica limpiar el área, asegurarse de que todos los equipos estén en buen estado y que los materiales estén listos para el estudio. Esto también implica preparar el equipo de medición, como el cronómetro, un lápiz y un cuaderno para registrar los datos.

También es posible realizar este tipo de estudios con herramientas avanzadas de generación de estudios de tiempos y movimientos como la aplicación móvil para cronometraje industrial de cronometras.com

Paso 2: Definición del área de estudio

Una vez que el área de trabajo está lista, es necesaria la definición del área de estudio, esto implica seleccionar el proceso o la línea de producción que se quiere analizar, teniendo en cuenta los siguientes criterios:

  • El impacto potencial de la mejora en la productividad y la calidad
  • La frecuencia y la duración del proceso
  • La complejidad y la variabilidad del proceso
  • La disponibilidad de los recursos humanos y materiales
  • También se debe identificar a los trabajadores que participarán en el estudio, el número de trabajos a realizar y el tiempo que se necesita para completar cada tarea.

Paso 3: Observación y medición

Después de definir el proceso o la línea de producción que se va a estudiar, se debe registrar y analizar el trabajo que realizan los operarios.

Esto implica observar con atención las tareas que componen el trabajo y cronometrar el tiempo que se emplea en cada una de ellas.

Para obtener mediciones precisas se debe usar un cronómetro y anotar todos los datos en un cuaderno otra opción es usar una aplicación especializada.

Al registrar los datos es importante incluir todos los detalles relevantes, como las condiciones ambientales, las pausas, los retrasos o las dificultades que puedan afectar al rendimiento.

Algunos aspectos que se deben tener en cuenta al observar y medir el trabajo son:

  • El número de observaciones necesarias para obtener un tiempo representativo del trabajo.
  • El método de muestreo aleatorio o sistemático para seleccionar las observaciones.
  • La forma de clasificar y agrupar las tareas según su naturaleza y frecuencia.
  • La forma de aplicar los factores de corrección o suplementos por fatiga, demora o condiciones especiales.
  • La forma de calcular el tiempo estándar del trabajo a partir de los tiempos observados y los factores aplicados.

Estos aspectos pueden variar según el tipo de trabajo, la complejidad del proceso y el objetivo del estudio. Por lo tanto, es necesario adaptarse a cada caso y seguir una metodología adecuada.

Paso 4: Análisis de los resultados

Después de realizar las mediciones del trabajo, se debe evaluar y mejorar el proceso. Esto implica analizar los datos obtenidos y detectar los cuellos de botella, puntos críticos o problemáticos del proceso que puedan afectar a la eficiencia.

También se deben buscar soluciones para optimizar el tiempo de producción y aumentar la productividad sin sacrificar la calidad.

Algunas soluciones que se pueden aplicar para mejorar el proceso son:

  • Eliminar o simplificar las tareas innecesarias o redundantes.
  • Rediseñar o estandarizar las tareas complejas o variables.
  • Reorganizar o redistribuir las tareas entre los operarios o las máquinas.
  • Capacitar o motivar a los operarios para mejorar su rendimiento.
  • Incorporar tecnología o herramientas que faciliten el trabajo.

Paso 5: Implementación de las mejoras

Una vez que se han definido las mejoras a implementar, es necesario aplicarlas en la línea de producción o proceso para mejorar la eficiencia.

Esto implica realizar los cambios necesarios en las tareas, los recursos, las herramientas o la tecnología que se utilizan para el trabajo.

También implica capacitar a los trabajadores para que se familiaricen con los nuevos procedimientos y puedan adaptarse a ellos.

Algunas acciones básicas para aplicar las mejoras son:

  • Comunicar a los trabajadores los objetivos y beneficios de las mejoras.
  • Realizar pruebas piloto o simulaciones para verificar el funcionamiento de las mejoras.
  • Establecer un cronograma y un presupuesto para la implementación de las mejoras.
  • Monitorear y evaluar el impacto de las mejoras en el tiempo y la productividad del trabajo.
  • Realizar ajustes o correcciones si es necesario.

Paso 6: Evaluación

Una vez que las mejoras se han aplicado, es necesario verificar y seguir los resultados para determinar si se han logrado los objetivos esperados.

Esto implica realizar mediciones nuevamente para comparar los resultados anteriores con los resultados actuales. Si los resultados son positivos, entonces el proceso de mejora se considera exitoso.

Algunas acciones básicas para verificar y seguir los resultados son:

  • Utilizar indicadores de desempeño que permitan medir la productividad, la calidad, el tiempo y el coste del trabajo.
  • Realizar revisiones periódicas para conocer el grado de avance y cumplimiento de las mejoras.
  • Realizar análisis de tendencia para detectar si el proceso está mejorando o si hay aspectos que requieren atención.
  • Realizar análisis del valor acumulado para integrar las medidas de alcance, coste y tiempo del proceso y compararlas con lo planificado inicialmente.
  • Realizar ajustes o correcciones si es necesario.

Conclusión

Un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro es una técnica útil para mejorar la eficiencia en las líneas de producción o procesos.

Esta técnica se basa en el análisis de los tiempos y movimientos de los trabajadores para identificar los cuellos de botella de una línea de producción o proceso.

Esto le ayuda a reducir los tiempos de producción, mejorar la calidad, aumentar la productividad y disminuir los costos.

Seguir los pasos anteriores le ayudará a realizar un estudio de tiempos y movimientos con cronómetro exitosamente.

Si desea probar la herramienta que hemos creado para poder llevar a cabo este proceso de mejora, contáctenos.

Miguel Cano
Miguel Cano

Técnico en métodos y tiempos,
Desarrollador de software de cronometraje industrial, que permite medir y analizar el ritmo de trabajo, identificar cuellos de botella, reducir costes y aumentar la calidad.

Colaborador del departamento de Organización del Trabajo en CCOO,
asesorando sobre temas de métodos y tiempos y como formador.

Soy una persona curiosa, creativa y proactiva, siempre dispuesta a aprender y afrontar nuevos retos.

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